COLABORÓ: CARLOS C.
Como ven weyes, pues resulta que en una granja lechera en Alemania, se alinearon los astros para que ocurriera lo impensable. Según informa Reuters, en una granja localizada en Rasdorf el gas metano generado a partir de los gases intestinales de 90 vacas hizo explotar uno de los cobertizos de la finca, dañando gravemente el techo de la estructura.
Más allá del evidente susto, no paso nada grave, no se reportaron heridos, bueno... una de las vacas acabó con quemaduras pero ese... ese es otro pedo.
Por eso yo le saco a éste tipo de acontecimientos je je.
ResponderBorrar